El origen de una nación

Hola Lucas. Te invito a considerar el vocablo "Argentina" como una convención desafortunada. "Argentina" es el nombre con el que se demarca una extensa zona austral, una comarca variopinta, con la idéntica lengua de toda la amèrica hispana y carente de toda articulación nacional. Creo que el nombre podrìa ajustarse mejor a la provincia de Buenos Aires y poco más, dos realidades bien delimitadas ya por Urquiza en 1852. Si por el desarrollo económico se trata, el puerto no se aviene a la tipificación de "Tercer mundo", como mejor que yo lo experimentarás vos. Mi idea de la cohesión y de la constitución nacional, proviene del modelo de los países desastrados por la segunda guerra. ¿No es acaso que en un término inferior a 25 años pudieron Francia y Alemania, sobre todo esta última, reconstruir sus naciones?Ello no obedece a la idiosincracia étnica ni a la antiguedad histórica, ambos mismos componente que los arrastraron al desquicio belico, otras muchas veces antes. No, la restitución de sus poderíos económicos obedecieron a una intransigente ingeniería fiscal. Esos estados, aún hoy, gravan en un setenta por ciento las ganancias no reinvertidas en la producción. ¿Cómo es eso? No hay impuestos sobre aquellos beneficios que se vuelcan a la empresa o en acciones de empresas nacionales, en el caso de que no se las posea. Porque las "Naciones", tienen su origen històrico en la constitución y acumulación de capital. No hay nación sin monumentales reservas invertibles en obras viales, hidráulicas, energéticas, de infraestructura, etc.Es el caso por ejemplo, que para hacer un miserable trensito de alta velocidad, argentina tiene que pedir empréstitos que la desquiciará por siglos. Por otra parte, esos mismos crèditos, son de capitales argentinos que desconfìando de la nación se depositan en bancos extranjeros. Sin una rígida politica fiscal, con una dura legalidad, que llegue a considerar la evasión fiscal como de "Alta traición", no hay nación alguna posible. ¿Porquè no se hace? Es transparente: los honorarios y negociados de los funcionarios políticos, superan ampliamente los márgenes a partir de los cuales se gravarían las ganancias, por eso es el propósito de las actuales indulgencias y blanqueos. Es simple y es mecánico: si otros países se constituyeron, hay que explicar, con ciencia, porque nosotros no lo hemos logrado. Para el conocimiento de las claves, está la historia; solo hay que querer ver.
Lucas, una mirada memoriosa y realista, no me parece pesimismo. Vaya el optimismo para las endócrinas de la propia existencia, pero el que ante la reiterada circularidad de los desaciertos, aporrea el parche del optimismo, o es un pillo enganchado o es un necio.
4 de enero de 2009 12:46

El punto

¿Cómo pensará que es el mundo, uno que agoniza?

Quod

Somos, la leve nata de un programa crítico.
Un temblor, un milagro
sobre un mar de muertos.

La Jaula

En los funerales del amo, la servidumbre se mofa de la cermonia. El cadaver, es incapaz de regir ya sus mandatos. Unos pocos instantes, los esclavos deliran en los estragos de una libertad imposible: el mundo ha sido.